“Así también vosotros consideraos muertos al
pecado, pero vivos para Dios en Cristo Jesús, Señor nuestro. No reine, pues, el
pecado en vuestro cuerpo mortal, de modo que lo obedezcáis en sus
concupiscencias” Romanos 6:11-12
Pecado es la
condición en la cual todos los descendientes del caído Adán nacen (Rom 5:12).
Pecado es vivir nuestras vidas independientes a Dios. Es el resultado de ser
engañados por Satanás al creer que el propósito y significado en la vida pueden
lograrse apartados de una relación personal y de obediencia al Creador de la
vida (Deut 30:19-20, 1ª Juan 5:12). En los no cristianos, el pecado impregna la
vieja naturaleza, domina al viejo hombre y perpetua las obras de la carne.
Satanás está en el corazón de todo pecado (1ª Juan 3:8). Él engaña a la gente
haciéndola creer una mentira y aconseja rebelarse contra Dios.
Cuando
recibiste a Cristo, moriste al pecado y
su poder de dominarte fue roto. Satanás
y el pecado no han muerto, todavía son fuertes y atractivos. Pero tú ya no
tienes que pecar porque tú estás muerto al pecado y vivo para Dios en Cristo
(Rom 6:11). No estás muerto al pecado porque lo consideraste así, lo consideras
así, porque así es. En Cristo ya has muerto al pecado.
Pablo continúa
y dice que no usemos nuestros cuerpos como instrumentos de iniquidad (v13). Si
lo hacemos, le permitimos al pecado reinar en nuestros cuerpos mortales. Por
ejemplo, es prácticamente imposible que alguien cometa un pecado sexual y no
use su cuerpo como instrumento de injusticia, permitiéndole reinar al pecado.
Pídele al Señor que te revele cómo has usado equivocadamente tu cuerpo, en especial
sexualmente. Renuncia a ese mal uso y somete tu cuerpo a Dios como un
sacrificio vivo. Es tu responsabilidad no permitirle al pecado reinar en tu
cuerpo mortal obedeciéndolo en sus concupiscencias (Rom 6:12).
ORACIÓN. Amado Señor, sé que el poder del pecado
sobre mí ha sido roto. Ayúdame a vivir hoy en la luz de esa verdad al renunciar
al pecado y someter mi cuerpo a ti, en el nombre de Jesús, amén.
NEIL ANDERSON - (DEV. "VIDA NUEVA PARA EL MUNDO”)