DICCIONARIO EXPOSITIVO DE PALABRAS DEL ANTIGUO Y DEL NUEVO
TESTAMENTO EXHAUSTIVO – W.E. VINE
El Diccionario
Expositivo del Antiguo Testamento
será una herramienta útil en las manos del estudioso con escasos conocimientos
de la lengua hebraica. Le abrirá tesoros de la verdad que a menudo se
encuentran enterrados dentro del idioma original del Antiguo Testamento, a
veces cerca de la superficie y otras profundamente empotrados bajo la
superficie. El investigador conocedor de hebreo hallará de gran utilidad el
Diccionario Expositivo como libro de consulta. Y el estudioso que desconoce la
lengua podrá experimentar una satisfacción muy particular al usar esta
herramienta para excavar las verdades que están en la Biblia hebraica, verdades
que de otra manera no le serían accesibles.
Por supuesto que no se
necesita conocer el idioma hebreo para ser un estudiante serio del Antiguo Testamento. Las traducciones modernas de la Biblia y
los comentarios bíblicos son muy valiosos y tienen su lugar en el estudio
bíblico. Con todo, un libro de consulta que esclarece la lengua en que fue
revelado y escrito el Antiguo Testamento tendrá un valor muy evidente, incluso
para quienes no conocen el idioma. El hebreo, la lengua escogida por Dios para
registrar las profecías acerca de Cristo, posee admirables cualidades para
realizar este cometido. El idioma tiene una cualidad singularmente rítmica y
musical. Su literatura poética está dotada de una notable nobleza y dignidad de
estilo, lo cual, junto con su viveza, le permite ser un vehículo
particularmente eficaz para expresar las verdades sagradas. Los conceptos que están
por detrás de su vocabulario le imparten su carácter vivaz y pintoresco. (PRÓLOGO A.T.)
Cualquiera que haga una
contribución seria y sustancial a la comprensión del Nuevo Testamento rinde un servicio público, porque si la religión
es la base de la moralidad, es mediante el conocimiento de Dios que prospera el
pueblo. Como libro, el Nuevo Testamento se levanta solo y supremo, sencillo en
su profundidad, y profundo en su sencillez. Es el registro, en veintisiete
escritos, del origen, naturaleza y progreso del cristianismo, y en la calidad
de su influencia ha hecho más por el mundo que todos los otros libros juntos.
Somos más que
afortunados en tener este libro en una versión hecha inmortal por Casiodoro de
Reina, y estamos también llenos de gratitud por tenerlo en las versiones
revisadas de 1602, 1862, 1909, 1960 y 1977. Pero persiste el hecho de que
aquellos que dependen enteramente de una traducción tienen que perderse mucha
de la gloria y de la riqueza de estos Escritos. Siempre y cuando haya percepción espiritual, el que pueda leer el Nuevo
Testamento en el lenguaje en que fue escrito se halla en la mejor de las
condiciones para sacar el máximo provecho. Pero, naturalmente, no todos
pueden hacerlo; aunque este logro no sea en absoluto algo exclusivamente
reservado al erudito lingüista. Sin embargo, el lector promedio no se halla
totalmente alejado de los tesoros que yacen en el Nuevo Testamento griego,
puesto que estos han sido puestos a nuestro alcance mediante gramáticas y
léxicos. El propósito especial de estos auxiliares de estudio ha sido ayudar al
lector no familiarizado con el idioma griego. Por lo que respecta a mi
conocimiento de estas obras, no tengo duda alguna en decir que este Diccionario
Expositivo consigue más completamente este designio que cualquiera otro de los
esfuerzos ejecutados a este fin. Esto se debe a que es a la vez una
Concordancia, un Diccionario, y un Comentario, producido a la luz de la mejor erudición
disponible. (PRÓLOGO N.T.)