jueves, 3 de abril de 2014

MUJERES DEL ANTIGUO T. – ABRAHAM KUYPER 3 abril

MUJERES DEL ANTIGUO TESTAMENTO – ABRAHAM KUYPER






El autor de estos temas es el famoso teólogo holandés Abraham Kuyper, hombre de grandes principios, fundador de la universidad libre de Ámsterdam y autor de más de 200 obras.

Por tal razón, como todos los grandes hombres, puede decir cosas sustanciales en pocas palabras, y las sugestivas preguntas que aparecen al final de cada uno de capítulos de esta obrita son puertas abiertas a nuevos pensamientos relacionados con los suyos.

No hay temas más interesantes para las reuniones de señoras que las biografías bíblicas, y lo son especialmente las de mujeres del Nuevo Testamento. Sin olvidar que todos los pastores y predicadores pueden aprovecharse igualmente de los pensamientos de tan grande autor, expresado en un lenguaje claro y sencillo.

Aunque generalmente se acude para esto al Nuevo Testamento, y, exceptuando tres o cuatro figuras preferidas como: Ana la madre de Samuel; Miriam la madre de Moisés; Ruth y Noemí, o la viuda de Sarepta, la mayoría de mujeres de la Biblia quedan olvidadas de parte de los predicadores de cultos femeninos. Pero en estos comentarios se podrá sacar enseñanzas de todos los nombres de mujeres del Antiguo Testamento. Que Dios le bendiga a través de esta lectura, es nuestro deseo. (INTRODUCCIÓN)







MUJERES DEL NUEVO TESTAMENTO – ABRAHAM KUYPER







La mujer cananea “Y he aquí que una mujer cananea, que había salido de aquellos confines, gritaba diciéndole: ¡Señor, Hijo de David, ten compasión de mí! Mi hija es gravemente atormentada por un demonio” (Mateo 15:22). Léase: Mateo 15:21-28; Marcos 7:24-30.

Por el relato no podemos decir si esta mujer se convirtió. Sólo que Jesús alabó su fe y por ella consiguió que su hija fuera librada del demonio, pero no sabemos si su fe era verdadera fe para la salvación. Se nos dice que la mujer insistió, a pesar de ser rechazada su petición repetidamente y que finalmente Jesús accedió a concederle lo que le pedía. No se nos habla pues de gracia espiritual. Vemos que la comparación que hace Jesús de esta mujer, “echar pan a los perrillos” la clasifica como extraña al pueblo de Israel, no perteneciente al pacto. La mujer era cananea, descendiente del antiguo pueblo que ocupaba Canaán antes de la llegada de los Israelitas. Habitaba cerca de Tiro y Sidón, ciudades de pésima reputación.

La mujer tenía fe en que Jesús podía curar a su hija. Fe en un milagro. Podemos suponer que esta fe no era el producto de una tendencia natural, sino el resultado de la gracia común de Dios, que permitió el encuentro de esta mujer con su amado Hijo. Como resultado de esta entrevista y del milagro, el pueblo de Israel fue abochornado por su incredulidad. Esta mujer extranjera se adhería al Mesías, aunque esta adhesión fuera externa. Era una protesta contra la orgullosa creencia de los israelitas de que ellos habían de ser para siempre la única nación favorecida.


Dios tiene compasión y libra a los hombres de la miseria humana, sin necesidad de tratarse de la gracia que genera fe salvadora. La mujer nos enseña que en toda situación aflictiva hemos de orar. La mujer cananea oró de modo inteligente: sabía que Jesús podía salvar a su hija. Perseveró y venció.

Es verdad que no pedía una bendición espiritual, ni para ella ni para su hija. A pesar de ello, nos enseña algo sobre el misterio de la oración. Hay que orar sin la menor insinuación de duda. Hay que rendirse a la suprema soberanía de Dios. Cuanto más era reprendida con más intensidad pedía. Ya nos dice Santiago que el que ora dudando es como una “ola del mar echada de acá para allá por los vientos”. Esta mujer era lo opuesto. La fe es posible en el no creyente, aunque en este caso no se trata de la fe genuina, verdadera, que obra para salvación.


Preguntas sugeridas para estudio y discusión:

1. ¿Qué significa la frase: “No está bien tomar el pan de los hijos y echarlo a los perrillos?

2. ¿Nos avergüenza a veces Dios, dándonos como ejemplo “la fe en lo milagroso” hasta en un pagano?

3. ¿Qué nos enseña esta mujer respecto a la oración y a la perseverancia?











TRADUCCIÓN