martes, 4 de agosto de 2015

Disfrutando de privilegios espirituales 4 agosto




“Cristo es la Piedra viva, al acercarse a él, también ustedes son como piedras vivas, con las cuales se está edificando una casa espiritual. Son sacerdocio santo, ... ustedes son linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo que pertenece a Dios, ... ahora son pueblo de Dios; antes no habían recibido misericordia, pero ahora ya la han recibido.”  1 Pedro 2:4-10


Un estudiante universitario una vez le confesó a un pastor "he llegado a la conclusión de que no creo en Dios", "ya veo", el pastor contestó; "por favor platícame del Dios en quien no crees". El estudiante comenzó a describir a un ogro cósmico vengativo, injusto y arbitrario que se deleitaba en ver a los terrícolas dar tumbos en la vida en busca de significado y dirección. Después de escuchar esa descripción de Dios, el pastor sabiamente contestó: "yo tampoco creo en ese Dios".

Como ese estudiante, mucha gente tiene una visión deformada de Dios porque no pueden ver más allá de sus circunstancias y las condiciones que afectan nuestro mundo caído. Su visión distorsionada del mundo no los deja entender la bondad de Dios y su misericordia. Pero nosotros como creyentes lo entendemos porque vemos más allá del mundo natural y experimentamos Su gracia y bondad de muchas maneras.

La Escritura habla enfáticamente sobre los deberes y responsabilidades de los cristianos, pero todo eso se compensa con los derechos y beneficios que tenemos en Cristo. Al escribirle a los cristianos que estaban experimentando una persecución severa, el apóstol Pedro les recordó de sus privilegios y les hizo un llamado a alabar a Dios por Su abundante gracia (1 Ped 2:9). Ese es tu llamado también.

Estaremos considerando muchos de esos privilegios en este mes, incluyendo tu unión con Cristo, el acceso a Dios, el rol sacerdotal, seguridad espiritual, elección, dominio y herencia. Las implicaciones de todas ellas son alarmantes y deben ser una fuente de gran gozo y agradecimiento al estudiarlas de la Palabra de Dios.

ORACIÓN. Gracias Dios por el privilegio de ser tu hijo, te pido que me fortalezcas y me lleves a un conocimiento más pleno de tus verdades, necesito conocer tu gloria y tu gracia asombrosa, en el nombre de Jesús, amén.


JOHN MACARTHUR - (DEV. "VIDA NUEVA PARA EL MUNDO”)







TRADUCCIÓN