“Porque el amor de Cristo nos impulsa” 2 Corintios 5:14
A ver, haz una lista
rápida en tu cabeza de las personas que amas.
¿Quién califica para
estar en tu lista?
☐ ¿tus padres?
☐ ¿tus abuelos?
☐ ¿tus
hermanos, a lo menos algunas pocas veces?
☐ ¿tus amigos
cercanos?
☐ ¿el pastor o
maestro de Escuela Dominical o líder juvenil?
Aquí tienes otra
pregunta: ¿Quién devuelve tu cariño?
Es probable que recibas
un montón de cariño de un montón de personas, y animalitos domésticos. Pero,
¿notaste que falta alguien importante en la lista anterior? Hay alguien más que
debe estar primero en la lista de personas que amas, y de tu lista de los que
devuelven tu amor.
Es Dios.
Sí, te pedí que
nombraras "personas". Pero aunque Dios no es un ser humano, es un ser
personal. Te creó y quiere que sientas su increíble amor por ti.
Existe un problema:
Sentir el amor de Dios puede ser difícil. No podemos verlo y no podemos
tocarlo. Muchas veces ni siquiera lo sentimos.
Dios nos da seres
queridos por una gran razón: para que sintamos que su amor por nosotros es
seguro. Si queremos conocer el amor de
Dios, el amor humano nos brinda una pista enorme. Es una manera gigantesca
en que demuestra su amor por nosotros. El apóstol Juan lo dijo así:
"Amados, amémonos unos a otros, porque el amor es de Dios. Y todo aquel
que ama ha nacido de Dios y conoce a Dios" (1 Juan 4:7).
Cada vez que sentimos
un amor humano, es Dios rodeándonos con sus brazos: los papás cambian pañales
sucios, apaciguan pleitos, y proporcionan alimento y ropa y mucho más. Los
esposos y esposas se comprometen a amarse toda la vida. Y cada vez que alguien
atiende a una persona que no se puede cuidar a sí misma, prepara comida para un
amigo enfermo, dona dinero para los pobres, ayuda a un vecino a mover muebles o
realiza algún otro tipo de acción cariñosa, el amor de Dios brilla a través de
su conducta.
Como creyente, eres
alguien que muestra a otros el amor de Dios. Él obra por tu intermedio, porque
"el amor de Cristo nos impulsa" (2 Corintios 5:14). El amor viene de
Dios. Y las personas que sienten que tú realmente los quieres, percibirán el
amor de Dios.
JOSH MCDOWELL - (DEV. "VIDA NUEVA PARA EL MUNDO”)