Qué terrible escena
ocurrió en la casa de Jairo, uno de los principales de la sinagoga en los
tiempos de Jesús. Había confusión, duda, miedo y llanto cuando su hija murió.
Dice Marcos 5:38-40 “Y [Jesús] vino a casa del
principal de la sinagoga, y vio el alboroto y a los que lloraban y lamentaban
mucho. Y entrando, les dijo: ¿Por qué alborotáis y lloráis? La niña no está
muerta, sino duerme. Y se burlaban de él.”
Amado, déjame decirte
porqué hay tanto alboroto en tu vida, tanto duelo y luto. Es porque no crees
que Jesús pueda resucitar lo que ha muerto. No crees que Él sepa lo que está
haciendo. No crees que Él tenga un plan que da vida. Crees que es demasiado tarde
y que las cosas han ido demasiado lejos. No puedes creer que Jesús se encuentre
todavía trabajando, ya te has dado por vencido.
Somos igual de
culpables como lo eran aquellos burladores. También nosotros clamamos a Dios en
nuestro problema, exigiendo que Él nos conteste antes de que sea demasiado
tarde. Entonces, cuando la respuesta no llega, nos convertimos en dolientes. Temblamos ante el poder del diablo, como si
los demonios hubiesen ganado la victoria… ¡Como si Jesús hubiese perdido y
el diablo hubiese ganado!
A menudo las cosas van
de mal en peor, y, finalmente, decimos: “¡Se acabó! Ya es demasiado tarde. Por
una u otra razón, el Señor no nos va a rescatar de esta situación".
No es suficiente
amarle, servirle y adorarle sólo hasta el punto de la desesperanza. ¿Qué hay de
confiar en Él ahora que ya no hay esperanza? ¿Ahora que parece que nunca
conseguirás un trabajo? ¿O cuando las cosas se acumulan en todos los lados,
cuando parece humanamente imposible seguir?
Si Jesús entrara en tu
situación actual, ¿Qué encontraría? ¿Cómo reaccionarías a Él? ¿Todavía
llorarías? ¿Tu corazón todavía estaría en confusión? Espero que le digas:
“Señor, parecía que ya no había esperanza. Estaba a punto de darme por vencido,
pero Tú eres hoy el mismo que estaba en la casa de Jairo. Puedes traer a la
vida lo muerto y sanar este problema".
DAVID WILKERSON - (DEVOCIONAL DIARIO “ORACIONES”)