“Vestíos de toda la
armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las asechanzas del
diablo.” Efesios 6:11
El conflicto de los
creyentes con las fuerzas de oscuridad es llamado correctamente guerra
espiritual, ya que Satanás y su sistema del mundo malvado son hostiles a todo
lo que Dios hace. Por naturaleza son anti-Dios y anti-Cristo.
Satanás es la antítesis
de cada atributo divino. Dios es santo, Satanás es malo. Dios es amor, Satanás
es el odio personificado, Dios redime a Sus hijos, Satanás condena a los suyos.
Jesús revela gracia y verdad (Juan 1:17) pero Satanás no está en la verdad
porque no hay verdad en él, cuando habla mentira, habla de su propia
naturaleza, porque él es un mentiroso y padre de mentiras (Juan 8:44)
Dios da vida mientras
que Satanás engendra muerte (Heb 2:14). Dios produce amor, alegría, paz,
paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, mansedumbre y dominio propio (Gal
5:22-23). Satanás produce inmoralidad, impureza, sensualidad, idolatría,
hechicería, enemistades, celos, iras, contiendas, disensiones, herejías,
envidias, homicidios, borracheras, orgías y cosas semejantes a estas (v 19-21)
Dios usa las pruebas para probar la autenticidad de tu fe y
aumentar tu gozo y fortaleza espiritual (Sant 1:3). Satanás usa la
tentación en un intento de destruir tu fe y acabar con tu testimonio. Dios
otorga libertad de la esclavitud al pecado, mientras que Satanás quiere
esclavizarte al pecado por toda la eternidad (2 Tim 2:26).
Jesús es tu abogado,
intercediendo ante el Padre por ti (1 Juan 2:1) Satanás es tu acusador,
acusándote incesantemente por las cosas que Dios ya te ha perdonado (Apoc
12:10)
Como Satanás se opone a
todo lo que Dios hace, también se opondrá a los hijos de Dios. Cuando lo haga,
no te preocupes excesivamente o pienses en ello como algo injusto. Espera las
pruebas, prepárate y regocíjate porque ellas muestran que eres una amenaza para
el sistema de Satanás y una ganancia para el reino de Cristo.
JOHN MACARTHUR - (Dev. "VIDA
NUEVA PARA EL MUNDO”)