“… He aquí
ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de salvación.” 2ª Corintios 6:2 (Leer: 2ª Corintios 5:18–6:2)
Nuestra nieta Maggie, de edad preescolar, y su hermana
Katie, que va al jardín de infantes, llevaron varias mantas al patio trasero,
donde construyeron una tienda para jugar. Ya habían estado allí durante un
rato, cuando la madre escucho que Maggie la llamaba.
«¡Mamá, ven rápido! —gritó Maggie—. ¡Quiero que Jesús entre
en mi corazón y necesito ayuda!». Aparentemente, en ese momento, sintió
claramente que necesitaba a Jesús y estaba lista para poner su fe en Él.
El llamado urgente de Maggie pidiendo ayuda para confiar
en Jesús me recuerda las palabras de Pablo en 2ª Corintios sobre la salvación.
El apóstol estaba exponiendo la realidad de que la venida de Cristo —incluso su
muerte y resurrección— había instituido una era llamada «el momento propicio de
Dios» (NVI). Actualmente, vivimos en
dicho momento, y la salvación está a disposición de todos ahora mismo.
Pablo afirmó: «He aquí ahora el tiempo aceptable; he aquí ahora el día de
salvación» (v. 2). Para todos los que todavía no han confiado en Jesús para ser
perdonados, el momento de hacerlo es ahora. Es urgente.
Quizá el Espíritu Santo esté alertándote sobre tu
necesidad de poner tu fe en Jesús. No lo pospongas; haz como Maggie. Corre
hacia Jesús. ¡Hoy es el día!
Señor Jesús, pongo mi fe en ti. Perdona mis pecados.
Sálvame hoy.
Hoy es el mejor día para entrar en la familia de Dios.
(La Biblia en
un año: Apocalipsis 22:1-21)
DAVE BRANON - (DEVOCIONAL “NUESTRO PAN DIARIO")