El Salmo 110 es una profecía directa acerca de la gente de los últimos
días que “se… ofrecerá voluntariamente
en el día de tu poder [del poder de Dios]” (Versículo 3). Martín Lutero
consideró este salmo como “una profecía gloriosa del reino de Cristo”. Y añadió
que: “Debería ser apreciado por todos en la iglesia”.
El pueblo de Dios
estará dispuesto en aquel día, serán voluntarios espontáneos. Así es como Dios
lo hace: Cuando Él determina que el día de Su poder ha llegado, levanta
profetas santos, vigilantes, y pastores que toquen la trompeta. Dios se mueve
sobrenaturalmente sobre un pueblo para responderles. Ellos prestan atención a
la llamada al arrepentimiento, a congregarse y a levantarse en fe para desafiar
al enemigo. Se despiertan, salen y desafían a los poderes de las tinieblas. El
pueblo de Dios comienza a clamar y Él envía profetas para despertar a la
iglesia.
Así fue cuando Sísara y
sus grandes carros de hierro subieron contra Israel. Dios levantó a Débora,
porque “los hijos de Israel clamaron a Jehová” (Jueces 4:3). Fue el Espíritu
del Señor que vino sobre ellos, como cantó más tarde Débora: “Por haberse
ofrecido voluntariamente el pueblo” (Jueces 5:2). Cuando el Espíritu de Dios verdaderamente viene sobre un pueblo, no
tienes que presionar, suplicar, llamar o usar tretas. Se vuelven
voluntariamente en el día de Su poder. Esto pasa aquí en la iglesia de Times
Square. La Palabra está limpiando y el Espíritu de Dios está derramándose sobre
muchos y ahora tenemos abundancia de voluntarios dispuestos a hacer cualquier
cosa por Jesús.
“Tu pueblo se te
ofrecerá voluntariamente en el día de tu poder, en la hermosura de la santidad”
(Salmo 110:3). Esta es una profecía de que Dios tendrá un pueblo que no verá la
santidad como una carga difícil de llevar. ¡No lo verán como algo difícil o
legalista, sino como algo hermoso! No se van a encoger bajo un mensaje duro,
sino más bien, lo van a ver como Dios cortando y puliendo un diamante, de forma
que brillen rayos de luz adicionales. Es una profecía certera que en el día de
maldad, de inmoralidad, Él levantará un ejército santo, que camine con alegría
en todos Sus mandamientos.
DAVID WILKERSON
- (DEVOCIONAL DIARIO “ORACIONES”)