"...Llegó palabra del señor a Elías, diciendo: «...yo
haré llover sobre la faz de la tierra»" 1 Reyes 18:1
Tres años antes, Dios
había dicho a Elías que predijera una terrible sequía. Al oírlo el pueblo, no
se hablaba de otra cosa. Luego le pidió que anunciara la lluvia y que les
instara a prepararse para ella. Debes entender que a menos que aprendas a
sintonizar tu oído espiritual con lo que Dios dice, no estarás listo para
enfrentar los avatares de la vida. Dios puede decirte cuándo ahorrar y cuándo
sembrar, cuando comprar y cuándo vender, cuándo venir a la mesa y cuándo
alejarte. "Entonces tus oídos oirán detrás de ti la palabra que diga:
«Éste es el camino, [anda] por él..." (Isaías 30:21). Pero Satanás también
te puede susurrar al oído cosas como: "Vas a ir a la quiebra. Te vas a
morir. Nunca vas a salir adelante. Nadie te ama, etc." ¡Dios nunca te dirá
cosas semejantes!
A pesar de lo que oigas a tu alrededor o dentro de ti,
tienes que creer en la fidelidad de Dios y confiar en que Él va a pelear
contigo.
Cuando se acercó el tiempo de ser crucificado, Jesús oró: "Padre,
glorifica tu nombre. Entonces vino una voz del cielo: «Lo he glorificado, y lo
glorificaré otra vez.» Y la multitud que
estaba allí y había oído la voz, decía que había sido un trueno..." (Juan
12:28-29). ¡Fascinante! Algunos oyen la voz de Dios mientras que otros que
están al lado no perciben más que ruido. Lo que Jesús escuchó reafirmó su fe y
le dio la fortaleza necesaria para ir victorioso a la cruz. Entonces, ¿qué, y a
quién, estás oyendo?
"Por amor de Sión no callaré y por amor de Jerusalén no
descansaré... hasta que restablezca a Jerusalén y la ponga por alabanza en la Tierra.. ." (Isaías
62:1-7)
BOB Y DEBBIE GASS - (Devocional "LA PALABRA PARA
HOY")


