“No que lo haya alcanzado ya, ni que ya sea
perfecto.” Filip. 3:12
Aún no
somos lo que debemos ser, lo que podemos ser ni lo que seremos cuando veamos al
Señor. Nuestra carrera espiritual comienza con un sentido de insatisfacción.
Pablo comenzó su carrera sabiendo que no había llegado.
Puedo
repetir ese testimonio de Pablo. Después de muchos años de andar con el Señor y
de participar en el ministerio, estoy muy consciente de que no soy lo que debo
ser. Como cualquier otro creyente, sigo en el proceso de crecimiento. Las personas que se sienten satisfechas con
lo que son espiritualmente han alcanzado un punto peligroso. Es probable
que sean insensibles al pecado y que tiendan a defenderse cuando debieran
reconocer su debilidad y buscar ayuda.
El
crecimiento espiritual comienza como cualquier carrera. El corredor sabe la
distancia que tiene que correr y pone el mayor esfuerzo en la línea de llegada.
La meta de Pablo era llegar a ser perfecto, pero el saber que no la había
alcanzado no lo desanimaba. Y tampoco debe desanimarlo a usted.
JOHN MACARTHUR - (Devocional "LA VERDAD PARA HOY”)