"En tu mano están mis tiempos." Salmos 31:15
El salmista escribe:
"...Yo en ti, Señor, confío; digo: 'Tú eres mi Dios'. En tu mano están mis
tiempos" (Salmo 31:14-15). A lo largo de tu caminar con Dios, te darás
cuenta de que pasas más tiempo esperando que recibiendo. Y cuando recibas lo
que estés esperando, ¡empezarás a esperar otra cosa! Así que si no aprendes a
esperar con gozo, vivirás frustrado. Pablo dice: "No nos cansemos, pues,
de hacer bien, porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos" (Gálatas
6:9). El "debido tiempo" es
cuando Dios cree que es el momento oportuno, no cuando tú lo crees. Dios ha
establecido un tiempo para cumplir las cosas en tu vida, así que más vale que
estés tranquilo y esperes, porque es entonces cuando sucederá, y no antes. Dios sabe lo que necesitas, y cuándo y cómo
hacer que te llegue.
Te preguntarás: '¿Y
qué se supone que tengo que hacer mientras espero?'. ¡Confiar en Él! Un
profesor bíblico escribió: "Dios me ha enseñado a seguir viviendo la vida
que tengo ahora mientras espero las cosas que van a ocurrir y que ya tengo en
mi corazón. Nos apresuramos tanto a querer dar comienzo a la siguiente etapa
que ni disfrutamos ni cuidamos de lo que tenemos en mano. Dios me dio una
visión diez años antes de que empezara a cumplirse. Creo que durante esos años
perdí mucho gozo intentando darle un comienzo antes del tiempo de Dios. Aprende
a disfrutar donde estás mientras esperas llegar a donde quieres estar".
"Por amor de Sión no callaré y por amor de Jerusalén
no descansaré... hasta que restablezca a Jerusalén y la ponga por alabanza en
la Tierra..." (Isaías 62:1-7)
BOB Y DEBBIE GASS - (Devocional "LA PALABRA
PARA HOY")


