"...Pasaba Eliseo por
Sunem, donde había una mujer distinguida..." (2 Reyes 4:8 LBLA)
La Biblia nos narra: "Un día pasaba Eliseo por
Sunem, donde había una mujer distinguida, y ella le persuadió a que comiera. Y
así fue que siempre que pasaba, entraba allí a comer. Y ella dijo a su marido:
...Te ruego que hagamos un pequeño aposento alto, con paredes, y pongamos allí
para él una cama, una mesa, una silla y un candelero; y será que cuando venga a
nosotros, se podrá retirar allí" (1 Reyes 4:8 LBLA). Aprendamos lo
siguiente:
1) Da espacio y tiempo a
aquello que más necesitas. En la vida no obtienes
lo que "quieres", sino aquello para lo que "te preparas".
La generosidad de esta mujer para con Eliseo dio como fruto en ella el poder
tener un hijo a pesar de ser estéril, y también ver a este niño resucitado
cuando murió por una enfermedad. Cuando das cabida a Dios en tu vida, le estás
dando cabida también a Sus bendiciones.
2) Fíjate en las cuatro cosas que esta mujer colocó en el
aposento del profeta:
a) Una cama. Habrá momentos en los que tengas que correr y otros
cuando tengas que descansar. Si no aprendes a bajar el ritmo, te quemarás.
b) Una mesa. Necesitas alimento espiritual para nutrir tu espíritu.
Si te has propuesto dar a otros, tienes que recibir.
c) Una silla. Esto nos habla de estudio. "Procura con diligencia
presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que
usa bien la palabra de verdad" (2 Timoteo 2:15).
d) Una lámpara. Un lugar iluminado. Aunque hayas estudiado mucho y te
hayas preparado a fondo, aun así necesitarás que el Espíritu Santo te revele las
verdades a tu corazón. Haciendo lo anterior llegarás a ser una persona
"distinguida".
"Por amor de Sión no callaré y por amor de Jerusalén
no descansaré... hasta que restablezca a Jerusalén y la ponga por alabanza en
la Tierra..." (Isaías 62:1-7)
BOB Y DEBBIE GASS - (Devocional "LA PALABRA
PARA HOY")