“Toda buena dádiva y
todo don perfecto desciende de lo alto.” Santiago 1:17
Lo que viene de Dios es bueno y perfecto. Dios nunca pudiera
producir lo malo porque su naturaleza es buena. Más bien produce muchísimas
buenas cosas. Mientras que nosotros tenemos una naturaleza que da origen al
pecado, Dios no es así.
¿Por qué trataríamos de satisfacernos con malos deseos
que dan por resultado la muerte cuando Dios está derramando todo lo que
pudiéramos desear para nuestra satisfacción? Solo un necio sería atraído con
semejante trampa cuando tiene a su disposición toda la bondad de Dios por su
misericordia. De igual modo puede compararse nuestra carne con un pozo de aguas
estancadas. Es absurdo creer que pudiéramos satisfacernos bebiendo de él cuando
podemos acudir a la fuente de agua viva misma que nos da toda buena dádiva y
todo don perfecto.
JOHN MACARTHUR
- (Devocional "LA
VERDAD PARA HOY")