“Mas de la casa de Judá
tendré misericordia, y los salvaré por Jehová su Dios; y no los salvaré con
arco, ni con espada, ni con batalla, ni con caballos ni jinetes.” Oseas 1:7
¡Preciosa palabra! El propio Jehová librará a Su pueblo
en la grandeza de Su misericordia, pero no lo hará por los medios ordinarios.
Los hombres son tardos para rendir a Dios la gloria debida a Su nombre. Si van
a la batalla con espada y arco, y ganan la victoria, deberían alabar a su Dios;
sin embargo, no lo hacen, sino que comienzan a engrandecer su propia diestra, y
a gloriarse en sus caballos y jinetes. Por esta razón, nuestro Jehová determina
con frecuencia salvar a Su pueblo sin utilizar medios secundarios, para que
todo el honor sea para Él solo.
Corazón mío, entonces
mira únicamente al Señor, y no al hombre.
Espera ver a Dios mucho más claramente cuando no haya nadie más a quién mirar.
Aunque no cuente con ningún amigo, ni consejero, ni nadie que me respalde, no
debo desconfiar, si puedo sentir que el propio Señor está de mi lado; sí, debo
estar alegre si Él da la victoria sin batalla, como el texto parece implicar.
¿Por qué habría de necesitar caballos y jinetes si el propio Jehová tiene
misericordia de mí, y alza Su brazo en mi defensa? ¿Por qué habría de necesitar
arco o espada si Dios me salvará? Debo confiar, y no temer, a partir de este
día y para siempre. Amén.
CHARLES SPURGEON - (Devocional "MEDITACIÓN DE HOY")