“A los que aman a Dios,
todas las cosas les ayudan a bien.” Romanos 8:28
Muchas veces Dios toma todo lo que Él permite que les
ocurra a los cristianos, aun lo que les parece lo peor, y convierte esos
acontecimientos finalmente en bendiciones. Esa es la divina providencia
obrando.
Sin que importe cuál sea su situación, de felicidad,
prosperidad y comodidad; o de tristeza, dolor y dificultades, a través de ella Dios obra para hacer lo
que finalmente es mejor y de más bendición para usted.
En su providencia, el Señor usa "todas las
cosas", circunstancias desagradables y perjudiciales así como las que son
buenas y agradables, para ir haciendo de usted la persona que Él quiere que
sea. Cuando se enfrente a las luchas de la vida, recuerde lo que Dios le
prometió al apóstol Pablo "Bástate mi gracia, porque mi poder se
perfecciona en la debilidad" (2 Co. 12:9). Esa promesa es también para
usted.
JOHN MACARTHUR
- (Devocional Diario "LA
VERDAD PARA HOY")