jueves, 16 de noviembre de 2017

"Un mundo diferente" 16 noviembre





“Ante todo, exhorto a que se hagan rogativas, oraciones, peticiones y acciones de gracias por todos los hombres; por los reyes y por todos los que ocupan altos puestos, para que vivamos con tranquilidad y reposo, y en toda piedad y honestidad.” 1ª Timoteo 2:1-2


Una joven en Somalia está muerta. Fue apedreada hasta que murió.

Según sus acusadores, esa joven de 23 años había confesado haber cometido adulterio, había querido ser juzgada por su delito y había pedido recibir el castigo que merecía.

De acuerdo a su padre, ella tenía 13 años y había sido violada por tres hombres. Cuando se quejó, fue detenida y condenada.

Lo que nosotros sabemos por cierto es que esa joven fue muerta a pedradas. Ella había suplicado por su vida, pero sus súplicas fueron ignoradas. Así es que la enterraron hasta el cuello, y 50 hombres se encargaron de apedrearla. Después de un tiempo, unas enfermeras la sacaron del pozo para ver si todavía estaba viva. Como todavía vivía, la volvieron a poner allí, y continuaron tirándole piedras.

Más de 1.000 personas se habían juntado para mirar.

A quienes la violaron, o cometieron adulterio con ella, no se les castigó de ninguna forma.

Lo que me lleva al tema de esta devoción.

Yo, al igual que muchos de ustedes, no siempre estoy contento con cómo van las cosas en el país. Muchos de ustedes, al igual que yo, no siempre estarán contentos con la forma de pensar de nuestros gobernantes.

Pero aún así, es necesario que cada uno de nosotros demos gracias al Señor por vivir en un país libre y que juntos oremos por las autoridades que el Señor nos ha dado.

Debemos estar agradecidos porque tenemos un país en el que la religión puede ser practicada libremente y en el que la mayoría de los jueces tratan de ser justos y equitativos.

Nuestro país es un regalo precioso de Dios que debe ser protegido y preservado no sólo con acciones, sino también con oración.

ORACIÓN: Querido Padre, te doy gracias por haberme regalado libertad. Ayúdame a usar esa libertad para orar por los líderes, gobernantes y jueces de mi país. Bendícelos con tu gracia para que sigan tus caminos. En el nombre del Salvador que me liberó del pecado, la muerte, y el diablo. Amén.



CRISTO PARA TODAS LAS N. - (DEV. “ALIMENTO DIARIO”)









TRADUCCIÓN