“Porque en él fueron creadas todas las
cosas, las que hay en los cielos y las que hay en la tierra… sean tronos, sean
dominios, sean principados, sean potestades; todo fue creado por medio de él y
para él.” Colosenses 1:16
“Y él es la
cabeza del cuerpo que es la iglesia… para que en todo tenga la preeminencia”
(Versículo18).
Dios el Padre
puso a Cristo en el trono como rey sobre todas las naciones y toda la
naturaleza, y como Señor sobre la iglesia. Pablo está diciendo: “No importa
cómo se vean las cosas. Pareciera que todo está fuera de control y que el
diablo ha tomado el poder. Pero lo cierto es que Dios ha puesto todas las cosas
bajo los pies de Jesús. ¡Cristo aún es rey sobre todas las cosas!”
Estos pasajes
demuestran que el Dios todopoderoso ha dado el dominio sobre todas las cosas a
Jesucristo. Sin embargo, todo a nuestro alrededor vemos como nuestra sociedad y
gobierno rechazan reconocer la autoridad y señorío de Cristo. Estamos quitando a Dios de nuestras
escuelas y de nuestras cortes, y lo estamos ignorando al crear nuestras leyes.
Yo creo que la
razón detrás de todo el derrame de sangre, violencia, odio racial,
desintegración moral, abuso de drogas, y el brote mortal de enfermedades
sexuales en nuestra sociedad es que América ha rechazado el señorío de Cristo.
Los legisladores, educadores y los medios de comunicación han hecho de Dios un
tema del cual no se puede hablar.
Peor aún, Jesús
está siendo destronado en las iglesias alrededor de la tierra y en las vidas de
multitudes de creyentes. Se puede entender que una persona impía quiera
destronar a Cristo, pero ¡Cómo debe entristecer al Padre ver como aquellos que
se hacen llamar por su nombre destronan a Cristo!
Debido a que
Dios ha hecho que Cristo sea todo para la iglesia, no debemos tener ningún otro
recurso, referencia o consejero antes que Jesús. Todo el gobierno, guía y
consejo de la iglesia debe venir de Él: “Y el principado sobre su hombro; y se
llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de
Paz” (Isaías 9:6).
DAVID WILKERSON - (DEVOCIONAL DIARIO “ORACIONES”)


