Año 1 - Semana: 49 - Día: 6
LEE Ezequiel 4:1-17
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Dios le reveló a Ezequiel las consecuencias de la maldad de la casa de Israel.
MEDITA. Dios le ordenó a Ezequiel que hiciera una especie de
dramatización sobre el castigo que recibiría la casa de Israel al ser sitiada
Jerusalén. El profeta haría una representación de la maldad acumulada por ese
pueblo y el castigo que vendría sobre ellos.
En el caso del sitio
de la ciudad de Jerusalén, una de las consecuencias más impactantes iba a ser
la escasez de alimento y bebida. Además, al faltar el pan y el agua se
produciría angustia y espanto.
Una de las
características del ser humano bajo el dominio del pecado es el de actuar
neciamente e ignorar que una satisfacción temporal puede traer resultados
desastrosos. Es triste ver en nuestro continente la destrucción masiva de los
recursos naturales por la ambición de ciertos grupos. Asimismo, somos testigos de un desprecio por la vida y el descuido de
quienes son más vulnerables como el caso de los niños. Se ha dicho que los
que tienen pan también sufren angustia por temor a los que no lo tienen.
Tenemos que
escudriñar la palabra de Dios y aprender con la experiencia de la casa de
Israel y compararla con nuestra propia "casa", preguntándonos
¿actuamos mejor que ellos?
APLICA. ¿Encuentras alguna similitud con la
situación de nuestros pueblos? ¿Podemos tener "voz profética" contra
la maldad actual?
ORA. Padre, que mi vida proclame tu justicia.
UNIÓN BÍBLICA INTERN. - (Dev. “ENCUENTRO CON DIOS”)