sábado, 3 de diciembre de 2016

La gloria de Dios está doquier 3 diciembre





Año 1 - Semana: 49 - Día: 1



LEE Ezequiel 1:1-28 Ezequiel tuvo una visión extraordinaria que le mostró la gloria de Dios.


MEDITA. El profeta Ezequiel se encontraba cautivo en Babilonia y estando junto al río Quebar tuvo una visión de Dios. La descripción de la visión contiene una rica y compleja simbología que incluye principalmente cuatro seres (Querubines) con ruedas y un trono ocupado por alguien que parecía un hombre, rodeado de un resplandor similar a un arco iris.

Este capítulo no es fácil de entender y la visión de Ezequiel pudiera generar interpretaciones y hasta especulaciones fantasiosas; pero esa experiencia vivida por el profeta le mostró que Dios estaba presente aun en esa tierra de cautiverio. Para los pueblos de esa época los dioses estaban confinados a determinados lugares y santuarios. Aun los judíos no concebían la presencia de Dios fuera de su tierra y su santuario, de tal forma que en su exilio se desalentaban al estar lejos de su patria y del templo.

El Señor manifestó su gloria en ese lugar como una evidencia de su omnipresencia y como una muestra patente de acompañamiento para su pueblo. Es interesante que el lugar donde se desarrollaron estos acontecimientos sea el mismo que ocupa el moderno Irak. Podemos extraer algunas aplicaciones para nuestro tiempo respecto a la acción de Señor en todas las naciones. Dios no está confinado a un santuario o a un país, sino que se manifiesta en todas la naciones a través de personas que le son fieles. El pueblo de Dios no es abandonado dondequiera que esté.


APLICA. ¿Eres consciente de que la gloria de Dios no tiene límites geográficos, culturales ni de otra índole? ¿Estás viviendo lejos de tu patria o de tu familia? ¿Te sientes solo, derrotado? ¡Anímate! El Señor está a tu lado.


ORA. Padre, te pido que acompañes a tu pueblo en todas partes.



UNIÓN BÍBLICA INTERN. - (Dev. “ENCUENTRO CON DIOS”)









TRADUCCIÓN