“Cada uno debe velar no sólo por sus propios
intereses sino también por los intereses de los demás.” (Filipenses 2:4 CST)
En el tema de
las tareas del hogar, se puede decir en términos generales que las mujeres
cuidan mucho mejor de la casa que los hombres. El consejero matrimonial Doctor
James Dobson relata lo siguiente: “Hace algunos años mi esposa yo contratamos a
un técnico para que instalara una barbacoa de gas en el jardín. El día que lo
hizo nosotros estábamos fuera. Cuando volvimos nos dimos cuenta de que la había
colocado unos 20 cm
más alto de lo que queríamos. Mi esposa Shirley y yo nos quedamos mirando el
aparato y nuestras reacciones fueron bastante distintas. Yo dije ‘Sí, tienes
razón, el técnico no la puso bien. ¿Qué vamos a cenar esta noche?’ Pero Shirley reaccionó de forma típica
femenina: ‘No puedo soportar esa cosa ahí, ¡parece que está colgada en el
aire!’.
Yo podría haber
vivido el resto de mi vida sin que me molestara lo más mínimo la altura de la
barbacoa pero para mi esposa era algo muy importante. ¿Por qué? Porque para un
hombre el hogar es un lugar donde puede relajarse, quitarse los zapatos y ser
él mismo. Pero para una mujer, especialmente un ama de casa, el hogar es una
extensión de su personalidad y ella expresa su individualidad y su carácter por
medio de él. Por eso los esposos deberían ser comprensivos, reconocer esta
perspectiva diferente y dar cabida a los intereses creativos de las esposas. A
propósito, el técnico tuvo que volver al día siguiente y rectificar su error.
Como se suele decir: ‘Si mamá no está contenta, nadie está contento’”.
BOB Y DEBBIE GASS - (Devocional "LA PALABRA
PARA HOY")
