Año 1 - Semana: 45 - Día: 6
LEE Juan 7:53 –
8:11 – Jesús nos da una lección ejemplar de cómo amar al pecador.
MEDITA. Los maestros de la ley y los fariseos intentaban
sorprender a Jesús, tendiéndole una trampa al presentarle la mujer encontrada
en adulterio. A la pregunta, "¿Tú qué dices?", nos vemos enfrentados
a diario los cristianos en cuestiones morales. A veces nos interrogan con mala
intención; en otras son sinceros en querer saber cuál es la posición bíblica y
evangélica.
Si Jesús hubiera dado
una opinión favorable a la mujer, sería acusado de no obedecer la ley (Lv. 20:10).
Si se hubiera pronunciado a favor de la pena de muerte, no sólo sería
denunciado a las autoridades romanas, sino que se presentaría ante las gentes
como alguien deshumanizado e intolerante. En
la escena, la mujer nos muestra que el pecado nos coloca en una posición difícil:
la pusieron en medio del grupo (3), para acusarla. La respuesta de Jesús
fue un gesto paciente y compasivo, que siguió a las palabras: "El que de
vosotros esté sin pecado sea el primero en arrojar la piedra contra ella."
(7)
Al mirar alrededor,
no podemos ocultar las conductas reñidas con la Palabra de Dios. Al oír a
Jesús, recordemos nuestra propia condición de pecadores, que no estamos
llamados a juzgar a los demás. Ninguno se sintió en condiciones de condenar a
la mujer. Para la época era insólito: una mujer era perdonada en forma total.
En sus palabras finales, apreciamos la comprensión del Señor Jesús por todo
pecador, pero intransigente con el pecado: "Tampoco yo te condeno. Ahora
vete, y no vuelvas a pecar." (11)
APLICA. ¿Adoptas una posición de tolerancia
o de prejuicio ante la inmoralidad? ¿Cómo podrías aplicar el gesto de Jesús a
situaciones actuales? Examina si en tu comunidad de fe existen situaciones
anómalas y ora por sabiduría para actuar como Jesús.
ORA. Señor, pon en mí un corazón misericordioso por aquellos que
están en pecado y dame una palabra sabia para cada situación.
UNIÓN BÍBLICA INTERN. - (Dev. “ENCUENTRO CON DIOS”)
