Año 1 - Semana: 47 - Día: 1
LEE 1 Reyes 6:1-38
–
La sabiduría aplicada en la construcción del templo de Dios.
MEDITA. Todo lo que hagamos para el Señor requiere ser hecho
con excelencia. Primero debemos asegurarnos que lo que vamos a hacer se ajusta
a los propósitos de Dios. Salomón actúa conforme a lo dispuesto por Dios. (2 S.
7:12-13)
Luego debemos tener
en claro qué deseamos conseguir con lo que vamos a hacer. El Señor expresa la
única razón valida para la construcción del templo (13). Nuestra mayor
motivación debe ser Dios mismo, su honra y gloria, y una profunda e intima
relación con él.
En tercer lugar
necesitamos entender qué es lo que el Señor espera de nosotros. Dios le muestra al rey que es lo que espera
de él (12) haciéndole ver que él tiene más interés en la obediencia que en
un templo sumamente costoso y bien decorado. Una cosa no niega a la otra, pero
no se puede tener la segunda sin la primera.
Finalmente debemos
ofrecer al Señor lo mejor de nuestros recursos. Si hubiéramos sido testigos
presenciales de la construcción del templo y de sus acabados, de seguro
habríamos quedado impresionados por tan bella obra de arte. Los materiales que
se usaron, que por cierto eran de primera calidad, y todos los detalles que se
tomaron en cuenta para realizar la obra, nos hablan del concepto que el rey y
el pueblo tenían sobre Dios. Este detalle se registra no para enseñarnos a
construir un templo, sino para hacer evidente la importancia de mostrar
cuidado, preocupación, honor y respeto por Dios y su santuario.
APLICA. ¿Cómo decides qué hacer y qué no
hacer? ¿Te aseguras de hacer todo con la autorización de Dios? ¿Preparas tu
corazón y te dispones de la mejor manera para honrarle? ¿Ofreces tus mejores
recursos al Señor, le sirves con excelencia?
ORA. Amado Señor, úsame como un instrumento de honra y gloria
para ti en todo lo que haga.
UNIÓN BÍBLICA INTERN. - (Dev. “ENCUENTRO CON DIOS”)