“…Yo los
apoyaré y los protegeré…” (Isaías 46:4 RVC) Leer: Isaías 46:4-13
«¿Cómo estás hoy?», pregunté sin pensar. Mi amiga de 84
años susurró, señalando los dolores en sus articulaciones: «La vejez es
difícil», y añadió seriamente: «pero Dios ha sido bueno conmigo».
«Nunca pensé que viviría hasta esta edad», afirma Billy
Graham en su libro Casi en casa. «Ahora soy viejo, y créanme, no es fácil». Sin
embargo, Graham observa: «En tanto que la Biblia no soslaya los problemas que
enfrentamos al envejecer, tampoco pinta a la vejez como un tiempo que haya que
aborrecer o una carga que haya que aguantar apretando los dientes». Después,
menciona algunas de las preguntas que ha tenido que enfrentar al envejecer,
como por ejemplo: «¿Cómo podemos, no sólo aprender a hacerle frente a los temores,
luchas y limitaciones crecientes que enfrentamos, sino también a fortalecernos
por dentro en medio de todas estas dificultades?».
En Isaías 46, Dios nos asegura: «Yo mismo los seguiré
llevando, hasta que estén viejos y canosos. Yo los hice, yo los llevaré. Yo los
apoyaré y los protegeré» (v. 4 RVC).
No sabemos
cuántos años viviremos en esta Tierra o qué enfrentaremos al envejecer, pero una cosa es segura: Dios nos cuidará hasta el fin
de nuestros días.
Señor, enséñanos a vivir bien cada día, para tener un
corazón sabio.
No tengas miedo de envejecer; ¡Dios te acompaña!
(La Biblia en
un año: Marcos 6:1-29)
LAWRENCE
DARMANI - (Devocional “NUESTRO PAN
DIARIO")