martes, 11 de agosto de 2015

¡La oscuridad no puede detener a la luz! 11 agosto




Cuando inicié este ministerio, yo prediqué en muchas iglesias alrededor de América alertándolas sobre el declive moral que vendría a esta nación. En Iowa, Oklahoma y en todos los estados del sur, prediqué que las drogas permearían en cada rincón de su territorio. Traficantes de drogas se harían presentes en las escuelas y en los parques. Yo alerté sobre una homosexualidad descarada, sobre desfiles con desnudos que acontecerían en las ciudades, y profeticé que desnudez y actos sexuales serían transmitidos por televisión en horas pico.

Mucha de la gente que me escuchó predicar me miraba como si hubiera venido de Marte. Pastores me reprendieron y cristianos sinceros vinieron a mí diciendo, “¡No puede ser! Dios nunca permitirá que esto suceda en América.” Hoy, algunas de estas personas son abuelos. Ellos se sientan frente a la TV a ver las películas categoría R que yo profeticé, y sus nietos son adictos a las drogas y al alcohol. La oscuridad que yo alerté ha llegado.

¿Puede usted imaginarse cuánta oscuridad habrá en diez años, habrá el Señor de demorarse?

Entonces, le pregunto: así como usted observa a la oscuridad permear por todas partes, ¿aún usted cree que ésta sobrepasará la luz del Evangelio? ¿Tiene usted temor de que la oscuridad lo oprima, lo extinga?

¡No, nunca! El pueblo de Dios nunca debe ser intimidado por la oscuridad y la furia del enemigo. ¡La Biblia dice que Jesús se levantará y brillará sobre la oscuridad no importando cuán oscuro el mundo llegue a ser! “El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos.” (Isaías 9:2).

Nosotros vivimos en un tiempo donde predomina la muerte y la oscuridad. Pero Dios dice que es en estos tiempos cuando Él brillará con Su luz más deslumbrante: “Guiaré a los ciegos por un camino que no conocían; los haré andar por sendas que no habían conocido. Delante de ellos cambiaré las tinieblas en luz y lo escabroso en llanura. Estas cosas les haré y no los desampararé.” (Isaías 42:16).

¡Ninguna oscuridad podrá apagar la luz de Dios! ¡Así que quita tu mirada de la oscuridad, del pecado, de la furia de gente violenta, y cree que el Señor vendrá con Su resplandor y efusiva luz!


DAVID WILKERSON - (DEVOCIONAL DIARIO “ORACIONES”)







TRADUCCIÓN