Una de las mayores
bendiciones de un verdadero creyente es escuchar y conocer la voz de Dios. Hoy
en día es posible escuchar la voz de Dios tan claro y cierto como lo hicieron
Abraham y Moisés; tan claro como Samuel y David; ¡y Pablo, Pedro, los apóstoles
y Juan en la isla de Patmos! Dios ha prometido hacer claramente notoria Su voz
por última vez durante los últimos días. Él nos ha dado una promesa y una
advertencia acerca de escuchar Su voz. Dios va a reunir a un remanente santo y
apartado en un Sión espiritual y hacerles notoria Su voz. "…sino que os habéis acercado al monte de Sion, a la ciudad del
Dios vivo, Jerusalén la celestial, a la compañía de muchos millares de
ángeles" (Hebreos 12:22).
Dios tiene este mensaje
para todos los que han sido llamados: ¡La voz de Dios, que hizo temblar la
tierra en las generaciones pasadas se escuchará de nuevo con poder en un último
temblor! "La voz del cual conmovió entonces la tierra, pero ahora ha
prometido, diciendo: Aún una vez, y conmoveré no solamente la tierra, sino
también el cielo" (Hebreos 12:26). Esta es la advertencia que Dios da a
sus hijos santos, los creyentes: "Mirad que no desechéis al que habla.
Porque si no escaparon aquellos que desecharon al que los amonestaba en la
tierra, mucho menos nosotros, si desecháremos al que amonesta desde los
cielos" (Hebreos 12:25).
¿Por qué está Dios
reuniendo un pueblo proveniente de iglesias muertas? ¿Por qué está llorando el
Espíritu: "Salgan de Babilonia, pueblo mío, no participan de sus
pecados"? Es porque Dios debe tener un pueblo (un Sión) en estos terribles
días, que no sean confundidos por falsa doctrina. Éstos son ovejas que no siguen falsos maestros, que conocen la voz de
su Amo. Dios les habla de una manera clara y segura, ¡y ellos viven por Su
voz! Ellos son dirigidos por Su voz, son consolados por Su voz ¡y son guiados
en todas las cosas por Su voz! ¡La gran característica de un pueblo santo es
que no confunde la voz de Dios! Ellos la conocen, la oyen y son gobernados por
ella. ¡Es segura, firme e inconfundible!
DAVID WILKERSON -
(DEVOCIONAL DIARIO “ORACIONES”)


