“¿Qué hombre de vosotros, si tiene cien ovejas y se le
pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto y va tras la
que se perdió, hasta encontrarla?” Lucas
15:4
Aquí, Jesús está
hablando de la oveja que ha estado en el redil. Claramente, ésta representa a
un miembro del rebaño de Cristo, a alguien que ha sido bien alimentado y guiado
por un pastor amoroso. Sin embargo, esta oveja se ha perdido y por lo tanto, el
pastor ha salido a buscarla.
Observe lo que Jesús
dice allí sobre el pastor: “Él va por aquélla que está perdida hasta que la
encuentra.” Dios nunca se da por vencido con nadie que le ha pertenecido y que
se ha descarriado. En su lugar, Él sale a buscar a esa oveja, la abraza y la trae
de regreso a su rebaño.
En otras palabras,
usted puede caer tan lejos en su pecado que incluso llega a tocar el borde del
infierno, y Él aún lo buscará, lo perseguirá. David testifica, “Si subiera a
los cielos, allí estás tú; y si en el seol hiciera mi estrado, allí tú estás”
(Salmo 139:8).
Nosotros hemos
escuchado la expresión “el infierno aquí en la tierra”. Esta es la vida de
aquéllos que han huido de Dios. Su “cama en el infierno” es una condición
terrible. Ésta implica ser cautivo del
pecado, alejarse tan lejos del Señor que usted eventualmente cae en un “sueño”
sin vida. Este “sueño” es acompañado por un miedo persistente que le
suspira, “usted está yendo directamente al infierno. Usted posiblemente nunca
regresará a Dios”.
El mensaje de Cristo para
nosotros es, “Tú tendrás tu cama en el infierno, pero no estás tan sumergido en
tu pecado que yo no pueda alcanzarte y recibirte en mis brazos.”
Cuando el pastor
encuentra al perdido, él carga a la criatura herida hasta su casa. Después él
reúne a todos sus amigos y vecinos, y les dice, "Gozaos conmigo, porque he
encontrado mi oveja que se había perdido"(Lucas 15:6).
“Os digo que así habrá
más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve
justos que no necesitan de arrepentimiento.” (Lucas 15:7).
DAVID WILKERSON -
(DEVOCIONAL DIARIO “ORACIONES”)