"Si tu don consiste en animar a otros, anímalos..." (Rom. 12:8 NTV)
Muchos hombres y
mujeres que abandonaron una labor habrían seguido adelante si hubieran recibido
una palabra de ánimo de alguien. El ánimo es tan vital que las Escrituras lo
colocan a la par de los dones de enseñanza y del liderazgo (Romanos 12:6-8).
Veamos dos acontecimientos que ilustran el poder del ánimo.
-Primer ejemplo: No hace mucho, veíamos la noticia
de cómo tres ballenas grises, aisladas por el hielo en Punta Barrow, Alaska,
flotaban magulladas y ensangrentadas, respirando con dificultad por un agujero
en el hielo. La única esperanza de las ballenas era ser transportadas de alguna
manera los 8 km
que el hielo las separaba del mar abierto. Los equipos de rescate comenzaron a
hacer respiraderos en hilera, de 20 en 20 centímetros , en
la capa de hielo de un grosor de 15
cm . Durante ocho días no cejaron en su intento de atraer
a las ballenas y llevarlas de un agujero a otro, kilómetro a kilómetro. A lo
largo del camino, una de ellas desapareció y se le dio por muerta. Pero al
final, con la ayuda de rompehielos rusos, las otras dos ballenas, Putu y Siku,
nadaron en libertad al mar abierto.
-Segundo ejemplo: Jackie Robinson fue el primer
jugador negro de EE.UU. que jugó en la primera división de béisbol. Aunque
derribó barreras raciales en el béisbol, en cada estadio seguía recibiendo una
multitud de insultos. Un día, jugando en su estadio local de Brooklyn, cometió
un error y sus propios fans comenzaron a abuchearlo. Mientras él se quedó
quieto y humillado en la segunda base, el jugador "Pee Wee" Reese se
acercó y se puso a su lado. Lo rodeó con el brazo y plantaron cara a la
multitud juntos. Los fans se callaron y siguió el partido. Robinson comentó
después que ese brazo rodeándole le salvó la carrera. El ánimo es algo muy
poderoso. Así pues, ¿a quién puedes animar hoy?
BOB Y DEBBIE GASS - (Devocional "LA PALABRA PARA
HOY")