“¿No sabéis que la amistad del mundo es
enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se
constituye enemigo de Dios.” Santiago 4:4
¿Sigue
aferrado usted al estilo de vida que llevaba antes de ser cristiano? Como
revela el versículo de hoy, si no hizo un esfuerzo consciente por separarse de
este mundo cuando se entregó a Cristo, tiene razón para poner en tela de juicio
si su salvación fue genuina.
Primera
Juan 2:15 dice: “No améis al mundo, ni las cosas que están en el mundo. Si
alguno ama al mundo, el amor del Padre no está en él”. Cuando usted se hace
cristiano, desea que se le separe del mundo. Sin duda el mundo seguirá tentándolo a usted en lo sucesivo, pero usted
debe dejar el malvado sistema de Satanás.
Es una
mentira decir que una persona puede ir a Cristo sin haberse apartado del mundo.
¡Tiene que haber un cambio de la manera de vivir! No es algo fácil de hacer.
Pablo nos dijo que no vivamos como vivíamos antes de que conociéramos a Cristo
(Ef. 4:17). Pero podemos vivir de esa manera porque tenemos una nueva
naturaleza.
JOHN MACARTHUR
- (Devocional "LA VERDAD PARA HOY”)