"Si te volvieres al
Omnipotente, serás edificado." Job 22:23
Elifaz, en esta expresión, habló una gran verdad, que puede ser un
resumen de muchas inspiradas Escrituras. Lector, ¿te ha abatido el pecado? ¿Te
has convertido en una ruina? ¿Ha salido la mano del Señor contra ti, de tal
forma que en bienes estás empobrecido y en espíritu estás quebrantado? ¿Fue tu
propia insensatez la que atrajo sobre ti toda esta dilapidación? Entonces lo
primero que se debe hacer es retornar al Señor. Con profundo arrepentimiento y
fe sincera encuentra el camino de regreso desde tu rebeldía. Es tu deber,
pues te has apartado de Aquel a quien profesabas servir. Es tu sabiduría,
pues no puedes oponerte a Él y prosperar. Es tu inmediata necesidad, pues lo
que Él ha hecho no es nada comparado con lo que podría hacer a modo de castigo,
pues Él es todopoderoso para castigar.
¡Considera cuál es la promesa que te invita! Serás "edificado".
Nadie sino el Todopoderoso puede levantar las columnas caídas y restaurar las
tambaleantes paredes de tu condición; pero Él puede hacerlo y lo hará si
regresas a Él. No te demores. Tu mente trastornada podría fallarte si continúas
rebelándote; pero una confesión sincera te aliviará, y la fe humilde te
consolará. Haz esto, y todo estará bien.
CHARLES SPURGEON - (Devocional "MEDITACIÓN DE HOY")