"El labio veraz
permanecerá para siempre; mas la lengua mentirosa sólo por un momento."
Proverbios 12:19
La verdad resiste el paso del tiempo. El tiempo la prueba, pero la verdad
soporta la prueba muy bien. Si, entonces, yo hubiera dicho la verdad, y por el
momento tuviera que sufrir por ella, debería estar contento de esperar. Si creo
también en la verdad de Dios, y me esfuerzo por declararla, podría enfrentarme
a severa oposición, pero no he de temer, pues al fin la verdad ha de
prevalecer.
¡Qué pobre cosa es el triunfo temporal de la falsedad! "¡El labio
mentiroso sólo por un momento!" Es como una simple calabacera que crece en
una noche, y perece en una noche; y entre mayor sea su desarrollo, más
manifiesto será su deterioro. Por otro lado, cuán digno de un ser inmortal es
la confesión y la defensa de esa verdad que no cambia nunca; ¡el Evangelio
eterno, que es establecido en la inmutable verdad de un Dios inmutable! Un
viejo proverbio reza: "Quien dice la verdad avergüenza al demonio."
En verdad, el que habla la verdad de Dios pondrá en vergüenza a todos los
demonios del infierno, y confundirá a toda la simiente de la serpiente que
ahora sisea sus falsedades. 
Oh corazón mío, esfuérzate en todas las cosas por estar del lado de la
verdad, tanto en las cosas pequeñas como en las grandes; pero, especialmente,
¡esfuérzate por estar del lado de Aquel por quien la gracia y la verdad han
venido entre los hombres!
CHARLES SPURGEON -
(Devocional "MEDITACIÓN DE HOY")
 




