martes, 25 de febrero de 2014

Busca un maestro. Llega tú a ser un maestro 25 febrero




"...Las obras que yo hago, [tú] también las [harás]..." Juan 14:12


Jesús fue el maestro perfecto. Dijo a sus discípulos: "...Las obras que yo hago, [tú] también las [harás]..." (Juan 14:12). Si quieres alcanzar la plenitud del potencial que Dios te ha dado, pídele que te dé un buen maestro que te haga avanzar con su guía y empuje. Algunos maestros están con nosotros durante un período corto, otros son para toda la vida; debes saber identificarlos. ¿Cómo se reconoce a un buen maestro? De ocho formas. Su credo es:

1) Estoy dispuesto a dedicarle el tiempo necesario a mi discípulo para entablar una relación estrecha con él.

2) Me comprometo a creer en su potencial, presentarle el futuro emocionante que veo delante de él, enseñarle a visualizar y expresar las posibilidades que concibo para su vida.

3) Estoy dispuesto a ser vulnerable y transparente delante de mi discípulo; voy a compartir no sólo mis puntos fuertes y mis éxitos, sino también mis debilidades, fracasos, quebrantos y pecados.

4) Estoy dispuesto a ser sincero pero positivo a la hora de confrontar los errores, las faltas y las áreas de inmadurez del discípulo.

5) Estoy dispuesto a seguir al lado del discípulo cuando éste pase por pruebas, aunque sean consecuencia de su propia ignorancia.

6) Estoy comprometido a ayudar a mi discípulo a trazarse metas para su vida espiritual, su carrera o ministerio, y a ayudarle a que prosiga su sueño.

7) Estoy dispuesto a evaluar con objetividad el progreso hacia la consecución de sus metas.

8) Por encima de todo, me comprometo a ser un ejemplo de vida en todo lo que enseño.


"Por amor de Sión no callaré y por amor de Jerusalén no descansaré... hasta que restablezca a Jerusalén y la ponga por alabanza en la Tierra..." (Isaías 62:1-7)


BOB Y DEBBIE GASS - (Devocional "LA PALABRA PARA HOY")






TRADUCCIÓN