"...Debajo están
los brazos eternos..." (Deut. 33:27 LBLA)
Al dirigirse al pueblo de Israel por última vez, Moisés
les dijo: "Nadie hay como el Dios de Israel, que cabalga los cielos para
venir en tu ayuda... El eterno Dios es tu refugio, y debajo están los brazos
eternos..." (Deuteronomio 33:26-27 LBLA). Al leer la Biblia te das cuenta
que Dios realizó hazañas espectaculares a favor de su pueblo en las cimas de
los montes. En el monte Moriah, se reveló a Abraham e Isaac como "Jehová
Jiré", que significa "Dios proveerá". En el monte Horeb, habló a
Moisés en la zarza ardiendo y cambió el destino de la nación de Israel. En el
monte Sinaí, le dio los Diez Mandamientos. En el Monte Carmelo, envió fuego del
cielo que consumió a los profetas de Baal y volvió el corazón de su pueblo a
Él.
Sin embargo, mientras
presentaba al pueblo un Dios de las alturas, de repente Moisés cambia un poco
el énfasis. Es como si estuviera pensando: 'No puedo
dejar que este pueblo tenga la impresión de que sólo se encuentra a Dios en la
cima, de que Él sólo está con nosotros cuando las cosas nos van bien'. Así que
añadió: "...El eterno Dios es tu refugio, y debajo están los brazos
eternos..." (Deuteronomio 33:27 LBLA). La palabra hebrea para "debajo" significa
"en el suelo". Podríamos entonces traducirlo así: "Los brazos de
Dios están debajo de ti cuando te encuentras por los suelos" No importa lo
profundo que sea el valle por el que tengas que pasar; la presencia de Dios
siempre irá aún más abajo. Quizás te sientas decaído hoy, pero por muy abatido
que te encuentres, Él siempre estará ahí. Debajo de ti están sus brazos
eternos. Recuerda: Dios no es sólo un Dios de las cumbres, sino también de los
valles.
"Por amor de Sión no callaré y por amor de Jerusalén
no descansaré... hasta que restablezca a Jerusalén y la ponga por alabanza en
la Tierra..." (Isaías 62:1-7)
BOB Y DEBBIE GASS - (Devocional "LA PALABRA
PARA HOY")