“Y conoceremos, y
proseguiremos en conocer a Jehová.” Oseas 6:3
Alcanzaremos el santo conocimiento, no de una sola vez,
sino gradualmente, y nuestro deber es perseverar y aprender poco a poco. No
debemos desesperar, aunque nuestro progreso sea lento, pues todavía hemos de
aprender. El Señor, que se ha convertido en nuestro maestro, no se dará por
vencido con nosotros, independientemente de cuán tardos de entendimiento
seamos; pues no sería para honra Suya que algún grado de insensatez humana
frustrara Su destreza. Él Señor se deleita en volver sabio al necio.
Nuestro deber es
apegarnos a nuestro tópico principal, y proseguir en conocer, no esta doctrina
peculiar o aquella otra, sino al propio Jehová. Conocer al Padre, Hijo, y Espíritu, el Dios Trino, esto
es la vida eterna: dediquémonos a esto, pues así obtendremos una instrucción
completa. Al proseguir en conocer a Jehová, aprenderemos la curación después
del desgarro, la restauración después del asolamiento, y la vida después de la
muerte. La experiencia tiene su obra perfecta cuando el corazón sigue las
pisadas del Señor Todopoderoso.
Alma mía, mantente cerca de Jesús, prosigue en conocer a
Dios en Jesús, y así llegarás al conocimiento de Cristo, que es la más excelsa
de todas las ciencias. El Espíritu Santo te guiará a toda la verdad. ¿Acaso no
este un oficio lleno de gracia? Confía en que Él lo cumplirá.
CHARLES SPURGEON - (Devocional "MEDITACIÓN DE HOY")