“Y en ningún otro hay salvación.” (Hechos 4:12)
Si usted da testimonio a otros de que el evangelio de
Jesucristo es el único evangelio, el único camino a Dios, no está proclamando
su propio punto de vista de la religión correcta, sino la revelación de la
verdad de Dios. Usted no predica el evangelio de Cristo sencillamente porque lo
conoce, porque se ajusta a su personalidad o porque quiere ser intolerante y
exclusivo. Usted presenta el evangelio
de Cristo porque es el único camino provisto por Dios para que las personas
encuentren la salvación del pecado y de la muerte eterna.
Usted predica el evangelio de Cristo como el único
evangelio porque Él dijo: “Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo”
(Jn. 10:9). Usted da testimonio de ese evangelio porque está de acuerdo con el
apóstol Pablo en que “hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los
hombres, Jesucristo hombre” (1 Ti. 2:5). De modo que está en buena compañía y
tiene un fundamento sólido cuando da testimonio a quienes no conocen a
Jesucristo del único camino de salvación dado por Dios.
JOHN MACARTHUR
- (Devocional Diario "LA
VERDAD PARA HOY")