“… dijo Jesús:
Venid en pos de mí, y haré que seáis pescadores de hombres.” Marcos 1:17
(Leer: Marcos 1:16-22)
Jacob Davis era sastre y tenía un problema. La fiebre del
oro estaba en su apogeo en el Oeste norteamericano del siglo XIX, y los
pantalones para trabajar de los mineros se desgastaban permanentemente. ¿Cómo
lo solucionó? Fue a una compañía local de productos textiles cuyo dueño era
Levi Strauss y compró tela para tiendas. Con ese material pesado y fuerte,
fabricó los pantalones… y así nacieron los vaqueros o jeans. En la actualidad,
estos pantalones (incluidos los Levis) están entre las prendas más populares
del mundo; todo porque a la lona de carpas se le dio un nuevo propósito.
Simón y sus amigos eran pescadores en el mar de Galilea.
Entonces, llegó Jesús y los llamó para que lo siguieran; y les dio un nuevo
propósito. Ya no pescarían peces; Jesús les dijo: «Venid en pos de mí, y haré
que seáis pescadores de hombres» (Marcos 1:17).
Con este nuevo
propósito en sus vidas, Jesús capacitó a estos hombres para que, después de su
ascensión, Dios pudiera utilizarlos
para cautivar los corazones de las personas con el mensaje de la cruz y su
resurrección. Hoy seguimos los pasos de ellos cuando compartimos la buena
noticia del amor y la salvación que Cristo ofrece.
Señor, ayúdame a declarar y demostrar este amor que
cambia la vida, el propósito y el destino eterno de las personas.
Con la nueva vida en Cristo, se nos ha dado un nuevo
propósito.
(La Biblia en
un año: Hebreos 7:1-28)
BILL CROWDER - (DEVOCIONAL “NUESTRO PAN DIARIO")