lunes, 3 de octubre de 2016

El poder de una oración 3 octubre





Año 1 - Semana: 40 - Día: 4



LEE 1 Samuel 1:1-28 Orar es un ejercicio de fe, perseverancia y paciencia.


MEDITA. Aunque la poligamia fue practicada por muchos de los patriarcas, no era la voluntad de Dios cuando instituyó el matrimonio (Gn. 2:24; Mt. 19:3-8). Muchas veces creemos que somos los únicos que tenemos problemas en el hogar. Este pasaje nos muestra que aún en las familias que Dios ha usado para cumplir sus propósitos, han existido conflictos. Pero es importante identificarlos, evaluarlos y buscar soluciones reconociendo que Dios también está muy interesado en que encontremos respuestas.

Ana fue al Templo de Jehová muy deprimida. Ella estaba sufriendo no solamente por la actitud burlona de Penina, sino también porque sus oraciones no hallaban respuesta. Ahora ella muestra a través de su voto, la importancia de su petición. En esto resaltan dos aspectos: su hijo serviría como sacerdote durante toda su vida y sería un nazareo. (Nm. 6:1-21)

El Señor tuvo presente su petición (19). Aunque parezca que Dios tarda en responder a nuestras oraciones, sus respuestas llegan en el momento apropiado. El ponerle nombre a un niño es siempre un acto importante. En los tiempos bíblicos tenía especial significado. Samuel quiere decir "nombre de Dios" o "nombre divino", y a diferencia de muchos niños, su vida correspondería al carácter de su nombre. Al llevarlo al Templo, llevó un becerro como sacrificio por el pecado (24). También ofreció a Elí su expresión personal de gratitud. (26-27)


APLICA. No veremos respuestas específicas si no tenemos peticiones específicas. ¿Tienes alguna petición específica que quisieras hacerle al Señor? ¿Sueles hacer compromisos cuando le pides algo al Señor?


ORA. Señor, ayúdame a persistir en la oración precisamente en aquellos momentos cuando quiero desmayar.



UNIÓN BÍBLICA INTERN. - (Dev. “ENCUENTRO CON DIOS”)









TRADUCCIÓN