“Por tanto, os ruego que me imitéis.” 1
Corintios 4:16
Como todos
los cristianos son imperfectos, necesitamos el ejemplo de alguien que también
sea imperfecto, pero que sepa cómo resolver la imperfección. Tal vez sirva esta
ilustración. Supongamos que decido participar en una peligrosa expedición de
alpinismo. Un helicóptero deja caer a un guía en la cumbre de la montaña, y
este mira hacia abajo y me dice: “Esta es la cumbre. Sube hasta aquí; este es el
lugar donde quieres estar”. Este guía no sería de tanta ayuda como alguien que
vaya subiendo delante de mí y me diga: “Sígueme. Conozco el camino hacia la
cumbre”.
Cristo nos muestra la meta que debemos alcanzar,
pero también necesitamos a alguien que sea ejemplo del proceso de alcanzar la
meta. Solo venciendo el pecado podemos ser más semejantes a Cristo, de
modo que necesitamos hallar a otro cristiano que también esté luchando para
vencer el pecado. Un ejemplo humano y espiritual puede mostrarle cómo afrontar
todas las consecuencias de nuestra condición pecaminosa. Comience a buscar y a
seguir a un guía espiritual.
JOHN MACARTHUR - (Devocional "LA VERDAD PARA HOY”)


