“Él había prometido [el
evangelio] antes por sus profetas en las santas Escrituras.” Romanos 1:2
¿Sabía usted que el Antiguo Testamento es absolutamente
consecuente con el Nuevo? Es porque las buenas nuevas son algo antiguo, no algo
nuevo. El Antiguo Testamento, desde Génesis hasta Malaquías, o cualquier libro
entre ellos, es todo acerca de la revelación de Jesucristo.
Jesús dijo que las Escrituras dan testimonio de Él (Jn.
6:39). Al hablarles a los hombres que iban por el camino a Emaús, Jesús dijo: “¡Oh insensatos, y tardos de corazón para
creer todo lo que los profetas han dicho! ¿No era necesario que el Cristo
padeciera estas cosas, y que entrara en su gloria? Y comenzando desde Moisés, y
siguiendo por todos los profetas, les declaraba en todas las Escrituras lo que
de él decían” (Lc. 24:25-27).
¿Por qué hoy es eso tan importante para usted? Para que
pueda estar confiado de que las Escrituras presentan la promesa de Dios de
buenas nuevas en Cristo.
JOHN MACARTHUR
- (Devocional "LA
VERDAD PARA HOY)