“Pero quedar en la carne
es más necesario por causa de vosotros. Y confiado en esto, sé que quedaré, que
aún permaneceré con todos vosotros, para vuestro provecho y gozo de la fe.” Filipenses
1:24-25
Una característica de un hombre espiritual es que sus
propios deseos están equilibrados por las necesidades de los demás. Ese es el
tipo de hombre que podía escribir: “Nada hagáis por contienda o por vanagloria;
antes bien con humildad, estimando cada uno a los demás como superiores a él
mismo; no mirando cada uno por lo suyo propio, sino cada cual también por lo de
los otros” (Fil. 2:3-4).
La iglesia de Filipos necesitaba a Pablo, como también
muchas otras iglesias. Pablo sabía que ellos lo necesitaban tanto que su
necesidad probablemente determinara su futuro, lo que expresó en el versículo
de hoy. Aunque Pablo deseaba estar con
Cristo en el cielo, también quería quedarse en la tierra para ayudar a
fortalecer la iglesia. Él sabía que, si se quedaba la iglesia glorificaría
mejor a Cristo, y glorificar a Cristo era lo único que deseaba.
Al tener un nuevo año por delante, ¿a qué está Cristo
pidiéndole que entregue su vida? Espero que sea un deseo de satisfacer las
necesidades de los demás con un corazón humilde.
JOHN MACARTHUR
- (Devocional "LA
VERDAD PARA HOY)