"...ÉL ES EL PRIMERO EN TODO" (Colosenses 1:18 NTV)
El arca del pacto
aparece mencionada 185 veces en la Escritura, entonces es algo muy importante.
El propósito de toda actividad que tenía lugar en el atrio y en el lugar santo
del tabernáculo de reunión era conducir al Lugar Santísimo, donde moraba la
presencia de Dios. Los símbolos del Antiguo Testamento, como el arca, son
reflejo de realidades del Nuevo Testamento. El arca del pacto, pieza central del
tabernáculo, es un símbolo del Cristo que amamos y al que servimos. Él es el
Señor, es supremo y no hay nadie como Él. ¡Solamente Él es digno de toda
adoración!
Escribe Pablo:
"Cristo es la imagen visible del Dios invisible. Él ya existía antes de
que las cosas fueran creadas y es supremo sobre toda la creación porque, por medio de Él, Dios creó todo lo
que existe en los lugares celestiales y en la tierra. Hizo las cosas que podemos ver y las que no podemos ver, tales como
tronos, reinos, gobernantes y autoridades del mundo invisible. Todo fue
creado por medio de Él y para Él. Él ya existía antes de todas las cosas y
mantiene unida toda la creación. Cristo también es la cabeza de la iglesia, la
cual es su cuerpo. Él es el principio, es supremo sobre todos los que se
levantan de los muertos. Así que Él es
el primero en todo. Pues a Dios, en toda su plenitud, le agradó vivir en
Cristo, y por medio de Él, Dios reconcilió consigo todas las cosas..."
(Colosenses 1:15-20 NTV). Si tu fe es egocéntrica, no podrás avanzar con Dios.
Pero si es "cristocéntrica", todo lo que tiene Cristo te pertenece a
ti también.
"Por amor de Sión no callaré y por amor de Jerusalén
no descansaré... hasta que restablezca a Jerusalén y la ponga por alabanza en
la Tierra..." (Isaías 62:1,7)
BOB Y DEBBIE GASS - (Devocional Diario "LA PALABRA
PARA HOY")