"... Todo lo que es de buen nombre... En esto pensad" Filip. 4:8
Ni la gente ni las
circunstancias dictan tu actitud, ¡tú la determinas! Para triunfar en la vida,
tienes que fijarte más en las oportunidades que en tus derechos. El apóstol
Pablo escribió desde una celda de la prisión: "...Todo lo que es
verdadero, todo lo honesto, todo lo justo, todo lo puro, todo lo amable, todo
lo que es de buen nombre; si hay virtud alguna, si algo digno de alabanza, en
esto pensad" (Filipenses 4:8). Las circunstancias encarcelaron a Pablo
pero no pudieron abatirlo. Una de las mayores causas de insatisfacción es que
batallamos continuamente por hacer valer "nuestros derechos". ¿Te han
perjudicado? ¿Sientes que no te han tratado de manera justa? La razón es que
vives en un mundo imperfecto. Y mientras vivas en él no verás nunca el día en
el que todo lo que hagas tenga su justa recompensa.
Tienes que decidir:
gastar todo tu tiempo y energías en lo que podría haber sido, o superarlo y
centrarte en las posibilidades futuras. Aunque la verdad y la justicia estuvieran de tu
parte, tal vez no podrías enmendar todos los errores del pasado. Pero Dios
sí puede, así que déjalo en Sus manos. Seguir "luchando por tus
derechos" continuamente te hace una persona irascible y resentida; y esas
emociones destructivas te roban la energía y te vuelven pesimista. Además,
cuando te enfocas en tus derechos, significa que por lo general miras al
pasado. ¡Y no puedes avanzar si estás mirando al lado equivocado! Sólo si te
encaminas en la dirección correcta, podrás avanzar por ese camino. Eso no
significa que no te sientas molesto o dolido; quiere decir que eliges perdonar
y dirigir tu atención a lo que sí puedes controlar: tu actitud y tus
oportunidades.
"Por amor de Sión no callaré y por amor de Jerusalén no
descansaré... hasta que restablezca a Jerusalén y la ponga por alabanza en la Tierra.. ." (Isaías
62:1-7)
BOB Y DEBBIE GASS - (Devocional "LA PALABRA PARA
HOY")